¡HOLA! SOY MARÍA
Y quiero contarte un secreto
Mi trabajo empieza mucho antes de la foto: en la mirada, en los gestos, en la forma en la que respiras cuando te pones delante de la cámara.
Tengo una habilidad bastante curiosa
DETECTO MICROGESTOS
Esos movimientos sutiles que revelan si estás nerviosa/o, incómoda/o y soy capaz de llevarte de un estado de nervios o desconfianza a un estado de conexión, diversión y de mostrarte tal cual eres.
Y ahí está mi propósito: llevarte a un estado más óptimo, sin que tengas que decirme una palabra. Porque sé cómo guiarte con actitud, humor y confianza para que la cámara deje de ser un enemigo y se convierta en un espejo donde descubras tu mejor versión.
Mis sesiones no son solo fotos, son experiencias donde conectamos de verdad:
Te acompaño a pasar del nervio a la seguridad.
Transformamos juntos ese “no soy fotogénica/o” en un “¡no puedo creer que esa sea yo!”.
Y lo hacemos de manera natural, disfrutando el proceso, como si nos conociéramos de toda la vida.
Fotografío personas, pero lo que de verdad me apasiona es fotografiar actitudes: captar quién eres cuando sueltas el miedo y dejas salir tu autenticidad.
Conmigo, no necesitas ser otra persona, necesitas verte como realmente eres. Yo puedo enseñártelo.”
¿Buena Suerte?¿Mala Suerte?¡Quién Sabe!
Si algo he aprendido en la vida es que detrás de cada cosa mala que me pasa, algo bueno viene, y eso malo pasó para que lo bueno llegase a renovarme. Nadie te quita la impotencia del momento, o el dolor, pero cuando ese momento de frustración pasa, levantas la cabeza y una nueva oportunidad llega.
